¡Más madera!

jueves, 10 de febrero de 2011

P'AQUÍ P'ALLÁ*

Hoy es jueves y los jueves suele tocar nueva entrada en el blog, pero la verdad es que no se me ocurre nada de que hablar y cuando uno no tiene argumentos lo mejor que puede hacer es callarse…

…pero no es el caso, así que… os contaré lo que hice ayer.

Por la tarde -me salto la mañana porque no creo que os interese lo que desayuno- me fui a la redacción de Heavy/Rock a escuchar el nuevo disco de los renovados La Fuga. El disco se llama ‘Raíces’ y la verdad es que está bastante bien cuando te acostumbras al cambio de cantante.
El caso es que después de escucharlo tenía la entrevista con el grupo, que como marca la tradición “fuguera” vinieron todos a la cita, porque además al día siguiente (hoy) empezaban a grabar el video del single, “Ganas”, en la sierra madrileña.
La Fuga 2011 (y yo)
Como no podía ser de otra forma nos fuimos a un bar… y de eso “hasta aquí puedo leer”, porque la entrevista ya la encontraréis en los kioscos próximamente.
Lo que quería comentar es que durante la charla recordamos el viaje que hice a Londres con la formación original del grupo, (en portada del H/R Estatal nº5) cuando fueron a tocar a la sala Jamm, regentada curiosamente por un canario (de los de Canarias, no de los que vuelan) de nombre Fran al que sigo debiendo una visita/birra, poco antes de que se diera el anuncio de “la fuga” de dos de sus miembros.
Antes de... (parece coña el orden, ¿eh?)
Lo que quería hacer hoy es un homenaje a todos aquellos fans que ven cómo su grupo se separa y sus miembros empiezan caminos nuevos.
En el caso que comentaba, la escisión nos ha dejado por un lado a La Fuga, renovada y con bastante fuerza para retomar el camino que les llevó a lo más alto del rock español y por otro lado a Rulo y La Contrabanda, donde Rulo y Fito han emprendido un sendero que parece que les va llevando a saborear las mismas mieles de antaño. Viéndolo así parece positivo, los seguidores tienen doble ración de una receta que les gustaba, pero… eso también es: doble gasto en entradas, doble gasto en discos, doble gasto en merchan… porque hablo de verdaderos fans, no de los de “me lo bajo y ya si me gusta…”.
Me pongo en su piel porque recuerdo el pesar que yo mismo sentía cuando Kiske y Hansen dejaron Helloween, o con la separación de los Héroes del Silencio, Platero… tantos y tantos ejemplos hasta llegar a otros más cercanos como el de Saratoga o Sôber, estos últimos felizmente reunidos aunque tristemente no sea al completo.
Sôber
Entiendo al sector que piense que una de las partes es más fiel a lo que les gustaba aunque no puedan dejar de prestar atención a la otra, incluso al que le ilusiona que estas cosas pasen y alteren el panorama, aunque a mí, cuando hablamos de grupos formados por verdaderos amigos que un día se metieron en una furgoneta con sus guitarras, me sigue dando algo de pena.



Sôber 2010
La vida es así, la convivencia quema, son cosas que pasan, alguna vez tenía que explotar… eso lo escucho miles de veces al hablar con músicos, pero algunos románticos seguimos creyendo en el rock labrado en el garaje, en el local, rock intoxicado por el humo y borracho de cerveza… de ahí que me jodan tanto los proyectos artificiales que de vez en cuando nos intentan vender, aunque en el rock no pase tan a menudo.

Estoy con los que sienten propia la separación, con quienes deciden disfrutar simplemente de la música y no pensar en más y con quienes piensen que lo mejor en todos estos casos es ponerle a las nuevas criaturas nuevos nombres y respetar el legado de bandas que, quién sabe, quizá pasados unos años se pudieran haber retomado con sus formaciones originales. Eso lo supieron hacer los hermanos Escobedo, por ejemplo, cuando dieron forma a Savia y Skizoo, y ahí tenemos ahora a Sôber otra vez, grabando disco y volviendo a la carretera juntos (con el recuerdo a Alberto Madrid siempre presente).
Que luego están las reuniones peseteras, orquestadas entre despachos y no entre colegas, ante las que los fans vuelven a tomar dos caminos: uno, “a mí me da igual que no se hablen, lo que quiero es volver a verlos juntos”; y otro, “muy mal les tenían que ir las cosas para volver a juntarse”... en fin.

Reuniones y separaciones… como la vida misma, qué sería de nosotros sin ellas.
____________________________________________________________________________
*Canción de La Fuga, de su disco 'A Golpes de Rock&Roll', 2000

No hay comentarios:

Publicar un comentario