¡Más madera!

viernes, 21 de diciembre de 2012

Inauguración Gran Musical, Madrid



Miembros de Mägo de Oz, Saratoga, Hamlet, Vita Imana, Ankhara, Burdel King, Piel y Hueso, Wild, Burning Kingdom, Fiebre y alguno más que se me olvidará, se reunieron para apoyar la inauguración de una nueva tienda en Madrid de obligada visita para todo músico que se precie, cuya inclinación al mundo rockero parte desde su staff del que forma parte el que nos sirvió de anfitrión, Alberto Marín.
Con tanto músico de postín reunido no podía evitarse que entre cerveza y cerveza y entre canapé y canapé cayeran unas cuantas actuaciones en acústico sacando el mejor partido al stock de la tienda, desconozco si los instrumentos que utilizaron volverán a la venta revalorizados tras pasar por sus manos… es una idea.
Mientras comentábamos con Javier Cardoso, Poppy (Vita Imana) o Javier Endara (Wild) tanto las bondades de la tienda como la actualidad de sus respectivas bandas, en el piso superior se preparaba el set en el que tendríamos primero a Anono, Javi Díez, Sergio Martínez, Patricia Tapia y Alberto Marín para interpretar el “Proud Mary” de la Creedence y más tarde Cecilio Sánchez-Robles y Tete Novoa se unirían al grupo para hacer un tema que creo que ni sus autores originales han hecho en directo, el “I Remember You” de Skid Row, que no pudo llegar más alto para no reventar los cristales del flamante local. Todo un detalle tener juntos delante a Alberto, Cecilio y Sergio… otra idea que ahí queda, quizá germen de ese regreso de Ankhara del que se lleva hablando casi desde que se separó la banda y que tanto nos gustaría.
La velada continuaría con la actuación de Piel y Hueso tras la que ya tuve que enfilar la calle Ríos Rosas (muy destacable el que llamaré “triángulo de las válvulas” que se ha formado de importantes tiendas musicales en la misma zona) dejando atrás tan buena compañía. Tengo bastante claro que la próxima vez que salga de allí no será solo con unas cuantas fotografías, porque solo tener cerveza, vino y buen queso manchego cerca impidió que el suelo se llenara de babas ante la selección de instrumentos que allí estaba ya expuesta por todos los rincones. Visita muy recomendable.




















jueves, 6 de septiembre de 2012

Nace RocK2.0

Hace mucho que no me paso por el blog... es cierto, y no debería ser así, pero esta vez la causa (además de haber más de una) está justificada, ya que llevamos desde el pasado mes de abril dando forma a lo que ya es una realidad, RocK2.0.


Una nueva web (se que hay miles) que trata de devolver un poco de dignidad a un mundillo que en los últimos años ha entrado en una dinámica muy peligrosa.
Bajo la máxima de hablar solo de lo que de verdad lo merezca y no de quien más pueda apo$tar por su proyecto, despertamos el espíritu de la vanguardia en nuestra música, en el rock, en el metal, en el punk... y queremos devolver la dignidad al músico y al periodista o crítico musical, algo que entre tanta oferta en ambos bandos se había perdido.

Con esta idea entre ceja y ceja intentamos centrarnos en las bandas emergentes, las realidades y las grandes promesas, en cuyos hombros recae el futuro del movimiento que amamos, el rock (hablando de una manera muy amplia), sin olvidar de dónde venimos, claro que los grandes nombres pueden aparecer en RocK2.0, pero pocas veces tendrán la silla reservada... y si decimos que siempre habrá quién se la mueva, aquí nos referimos a la silla. Somos profesionales y el fanatismo, aunque nos quede algo, lo tenemos muy olvidado y solo nos hemos quedado con la pasión por el rock sin mirarle la etiqueta.

Las últimas noticias (las más interesantes), las mejores entrevistas, los videos más recientes, reseñas (críticas) de los últimos lanzamientos y mucho más que música en una web en la que todo tiene su sitio y

Sean bienvenidos a RocK2.0 (www.rockdospuntocero.com)

jueves, 19 de abril de 2012

30 AÑOS DE ROCK… Y LO QUE QUEDA


Bienvenidos de nuevo hermanos. Lo primero que me gustaría hacer antes de contaros una nueva historia es disculparme (si hasta los reyes pueden…) ante todos los que habéis entrado al blog en los últimos meses (cómo pasa el tiempo) sin encontrar nada nuevo que leer… disculpadme por todo el tiempo que os he tenido abandonados, pero han sido causas de fuerza mayor (de la mayor de las fuerzas, más bien) las que me han apartado del teclado.

Dicho esto… érase una vez…
…pues érase una vez un joven estudiante andaluz cuya pasión por la música de vanguardia le llevó a patearse medio mundo y sobrevolar el otro medio para difundir la música y la palabra rockera… un día decidió fundar una revista… y de esto se cumplieron el pasado fin de semana 30 años.
El que escribe estas líneas ha tenido el honor de pisar la casa del Mariskal Romero durante casi una década y dicha celebración fue la mejor excusa para volver a la calle y disfrutar de la compañía y la música en directo.

La carta de presentación no podía ser mejor, o eso pensaba un par de semanas antes del evento, porque sí que mejoró con un aliciente especial por cada una de las actuaciones que pudimos disfrutar.
Dicen que el aleteo de una mariposa en Ciempozuelos puede causar un huracán en Melbourne (o algo así) y los últimos movimientos en el camino de baldosas amarillas, como si del mercado de fichajes futbolero del verano se tratara, provocó el huracán que casi nadie se esperaba.
Desde el anuncio de que Jose dejaba de ser la voz de Mägo de Oz (quién no empezó a escuchar a esta banda por su alucinante vocalista por aquel entonces) las especulaciones sobre el nombre de su sustituto han apuntado solo en una dirección, quizá en alguna más, pero el nombre de Leo Jiménez se iluminó en la mente de más de uno… y creo que en la de cierto batería también.
Ahí surgían dos corrientes de opinión: la primera la de los románticos que siguen creyendo en las bandas de colegas, en el orgullo del proyecto propio y en la diferencia entre el éxito y la autenticidad y el compromiso… estos no veían con buenos ojos a Leo (tan odiado como querido y respetado en todos los aspectos) como frontman de Mägo de Oz. La segunda corriente es la de los que son conscientes de que Leo ya lleva muchos años esperando en el umbral que divide el poder vivir al cien por cien de la música y eso, aunque sea como herramienta de la obra de otro (las bandas a ese nivel ya no son bandas, son empresas), es difícil de rechazar…

Esto no deja de ser un rumor, fuerte, viendo el agua que lleva el río más que escuchándola… pero lo que realmente pasaba era que Leo anunciaba su salida (o como lo quieras llamar) de 037 y el resto, más bien Ix acompañado de Matt de Vallejo, decidían continuar con ese proyecto, algo que muchos hemos visto como si Zakk Wylde hubiera continuado llamando Ozzy a una banda en la que ese cantante ya no está… el caso es que 037 (ya no le demos la vuelta al nombre) nos presentaba a su nuevo vocalista… y a un bajista viejo (Marcos Miranda) ya que Sergio Martínez también anunciaba que dejaba el grupo… y todo a la vez que Kiskilla y PERI hacían lo propio en Mägo de Oz (la cosa parece cada vez más blanca y embotellada ¿verdad?).
El programa continuaba con una de las pocas veces que se va a ver a Bürdel King antes de su salto de charco, por lo que aquí teníamos a Txus alterando la cosa un poco más, y ya junto a Sergio Martínez (yo no digo nada).
Luego, y anunciado pocos días antes, se presentaba el nuevo caminar de Leo Jiménez como solista y para terminar teníamos la presentación de un nuevo tema del todavía inédito nuevo álbum de Saratoga y la única actuación enchufada de Obús este año… dale un par de vueltas con la paleta del Mariskal presentando el evento y la entrega de premios y el quilombo (como a él le gusta decir) está montado.

La sala estaba prácticamente llena desde el primer momento y acabaría llenándose por completo, todo era interesante.
Para empezar Andy Martínez, la nueva voz de 037. El que para mí era uno de los más ilusionantes proyectos creativos de nuestro rock actual continúa y ahora habrá que ver cómo, pero en la forma hay pocos cambios. Andy va a tener que lidiar con una comparación obligada con Leo en la que hasta que los años vayan pasando va a salir perdiendo, ¿por qué? Porque tanto física como vocalmente es casi un clon de La Bestia… y creo que los nervios de la presentación tampoco le ayudaron.
En lo importante su voz copia directamente los registros de Leo y siguió en cada canción el patrón marcado por este, todo salvo que llegando alto no llega tan alto y que aun teniendo los registros adecuados le falta la transición entre ellos que es de lo que Leo puede presumir, por poner un ejemplo gráfico Andy hace: a---A!!! y Leo hace: ªªªaaaAAA!!! Pero viendo lo que Andrés hace actualmente es más que posible que nos encontremos ante otro portento del micrófono que perderá los nervios y se acoplará a la magnífica compañía que ahora tiene (a falta del nuevo bajista). Y si deja de moverse como Leo ya perfecto, aunque eso será difícil si durante mucho tiempo le ha tenido como referente.
Temas como “Tantas Vidas” con el que abrieron, “Héroe”, el sentido que ahora adquiere “Los Fuertes Sobreviven”, o el ya clásico de la banda “Bella Julieta” y el cañón “Desde el Ataúd”, necesitan el toque personal de su nuevo vocalista para que se mantenga el espíritu de calidad, desinhibición y potencia rockera que destilaba el proyecto que ahora lidera un Ix Valieri al que vimos ansioso por querer seguir adelante y agradecido al numeroso público que les estuvo apoyando desde el primer momento. Puliendo un par de cosas al chaval la banda volverá a ilusionarnos.

Sería Mariano Muniesa el encargado de presentar a Bürdel King con una frase, supongo que cómplice y buscando la coña, porque no se lo cree ni él ni nadie, ya que el disco nos ha dejado bastante que desear a la mayoría: “una banda que si hubiera nacido en Los Ángeles junto a Motley Crüe hubiera sido tan grande o más que ellos”… en fin, una provocación más de esas que nos gustan.
Ahí teníamos a Frank, Anono, Javi Díez (¿nuevo teclista de Mägo? Ya veremos), Sergio Martinez (¿nuevo baj…? jejeje), Alberto Marín y finalmente Txus con una explosión de pieles de leopardo, cebra y cuero negro que haría temblar a cualquier ecologista. Eso sí, vuelvo a decirlo, eso se puede hacer, pero les queda taaan forzado y desordenado… que parece que tienen un cubo lleno de ropa ochentena y antes de salir al escenario se lo echan por encima y que caiga lo que sea… Lo que importa, la música… servidor ya dijo en este blog su opinión de la presentación acústica, las canciones que pretendían ser canallas y pendencieras parecían de catequesis… nada que ver una vez que la electricidad pasa por sus manos, aunque haya temas que me sigan pareciendo más propios de ‘Héroes de Pacotilla’ que de Motley Crüe.
La voz de Txus no desentona tanto, incluso le queda bien a este estilo más macarra y llego más lejos al afirmar que el tema con el que se despidieron (ante la atenta mirada de Jose y Peri a los que tuve muy cerca) “Mi Nombre es Rock’n Roll”, me gustó más en la interpretación de Txus, para tal momento bien acompañado de un par de streapers. Pero lo mejor de la actuación fue, sin duda, el momento en que el propio batería-cantante-showman nos regala la presencia central de Patricia Tapia (esta sí que si fuera americana la tendríamos hasta en la sopa) y a su vez ella nos regala su voz con una interpretación enorme del “Proud Mary” de la Creedence. Momento de máxima altura en este vuelo.
“El Sexorcista”, “Esta Noche Huele a Rock’n Roll” o “665” dejaron contentos a sus cada vez más numerosos fans, quizá consiguieron alguno más y confirmaron las críticas de sus detractores, porque tampoco es que vengan a engañar a nadie y eso el morboso Txus también lo agradece. Dejo a su libre interpretación (a mí me hizo gracia) que tras el primer tema nos hiciera sonreír (eso lo consigue siempre) diciendo “está la cosita tensa” haciendo alusión al obligado encuentro en camerinos de todos los protagonistas citados antes.

La presentación de Oscar Sancho no pudo hacer más justicia, ni leerme más el pensamiento, con Leo Jiménez y su nuevo caminar en “solitario”. Es el mejor cantante que tenemos, de eso no hay duda, luego ya de gustos…
Entrecomillaba lo de “solitario” porque, como siempre ha dicho el propio cantante, tiene la suerte de estar muy bien rodeado de amigos y estos ser muy buenos músicos. Para la ocasión nos presentaba (ni más ni menos, al loro la banda) a Edu Brenes (Skunk D.F.) a la batería, Edu Fernandez (Khael, Stravaganzza, Skizoo…) al bajo y el resurgir de Antonio Pino (Ankhara) a la guitarra, ahí es “ná”.
Me sorprendió agradablemente mirar a un lado (no del escenario, al lado mío) y ver a Valieri apoyado en una columna atento a la descarga del que hasta hacía tan poco había sido su pareja artística, incluso siguiendo los temas con interés y quiero pensar que cierta nostalgia.
Como no podía ser de otra forma, y con unos gestos de humildad y casi diría de cansancio emocional superados con cada tema, la banda nos voló la cabeza con un pequeño repaso a la carrera más reciente de Leo: “Condenado”, “En Tu Habitación” y “Volver” como compromiso reiterado final demostraron quién sigue siendo la voz del rock y el metal a este lado del Missisipi. Jiménez quiso dedicar la actuación a dos personas con las que le hubiera gustado compartir escenario esa noche… Sergio y Matt, no hay que decir más. Actuación breve (¿dos veces buena?) y como suele decirse “fuera de concurso”, pero muy elocuente en sí misma, para dar paso a lo que se suponía que sería uno de los platos más fuertes de la noche antes del huracán 037/Leo, hablamos de Saratoga y su presentación en primicia de un tema perteneciente a ‘Némesis’, su nuevo disco.

Con el análisis de vocalistas que llevábamos no se me pasa decir que Tete Novoa se ha convertido en uno de los grandes. ¿No estaba claro? No, para mí en sus inicios con Saratoga dejaba alguna duda, pero la evolución que ha tenido es la que le deseo a Andy Martínez, porque tiene que seguir esa misma estela, cubrir el mismo puesto y dar su propio toque.
Los de Niko del Hierro volvieron a demostrar que los que les dan por perdidos en la lucha por el trono metálico que una vez ostentaron se equivocan, aunque se les da tan por supuesto que casi ni se les tiene en cuenta.
“Luna Llena” impresionante, “No Sufriré Jamás Por Ti” incendió toda la sala y personalmente me gustó escuchar un recuperado “Contigo Sin Ti”… el estreno de “Juicio Final” a la espera del juicio del tiempo y la escucha más serena, nos dejó algo fríos, por la novedad y por el parecido a simple vista a todos los singles que Saratoga ha sacado en la época post-Jero. Pero la actuación fue de diez, profesionalidad al máximo sobre el escenario toda la noche, eso se agradece.

Para terminar los ganadores del mejor directo del año, Obús, la banda más veterana que sigue demostrando lo que es el rock, cómo entender el heavy metal sobre las tablas y hacer que eso se traduzca en sensaciones en el público lejos de egos, problemas personales e idas y venidas en las bandas. El estado de forma de Paco y Fortu diría que deja de sorprender, pero no es verdad, a mí me sigue sorprendiendo y todo ocurre mientras te caen encima clasicazos increíbles como “Dinero, Dinero”, “Te Visitará La Muerte” o los que ya son más nuestros que suyos, como el que despidió la fiesta por todo lo alto con las tres generaciones de cantantes de Saratoga sobre el escenario compartiendo micrófono, casi todos los protagonistas de la fiesta ante nosotros y Oscar Sancho haciendo suyo el himno “Vamos Muy Bien” junto al maestro Fortu. Conociendo al “Lujurioso” seguro que habrá sido uno de esos momentos que se llevará a la tumba en el primer plano de la memoria, desde luego, como fan una vez más, yo así lo haré.
Gran fiesta, grandes momentos. Enhorabuena a la revista que nos ha acompañado a algunos durante toda nuestra vida y que así espero que lo siga haciendo. Sea como sea, siempre por el “rock-puro-rock”.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

BARRICADA SE ESTÁ "QUITANDO"


Barricada, a tope sin drogas también hubiera sido buen título, el caso es que hace ya unos días que se produjo la noticia, y aunque sus protagonistas han elegido el mejor método para comunicarlo a sus seguidores, sin marear la perdiz, sentándose de golpe en la taza del water para que el frío pase antes, creo que todos seguimos con la sensación de que no puede ser verdad.

Cuando me planteaba qué escribir sobre la noticia de la salida de Enrique Villareal (Drogas) de Barricada lo primero que me vino a la cabeza (después del chiste fácil: “Barricada deja las drogas”) fue el punto de vista de los fans que vuelven a verse en el papel de hijos de padres divorciados, que por un lado sufren la separación y por otro empiezan a recibir regalos impresionantes de cada una de las partes buscando su “cariño”, pero creo recordar que ese tema ya lo toqué cuando hablé de los lanzamientos de La Fuga y Rulo, no era plan de repetirse ahora con Barricada y Txarrena.
Txarrena
Luego pensé en el ejemplo más duro de madurez y evolución de una banda que hemos sufrido como fans, el de Metallica con el famoso corte de pelo y el giro que fue ‘Load’, que lleva al comentario que un día me hizo Fito Cabrales sobre la incongruencia que sería volver a cantar “Rompe Los Cristales” con el nivel de vida que tiene ahora, los años… la vida… todo cambia.

Pero el caso de Barricada es diferente, creo que a todos nos parecerá diferente. Barricada ha sido un ejemplo de coherencia en el rock, seguramente hayan sido los herederos más claros como banda del halo de pureza rockera y callejera que en su día transmitía Leño. Los años y las canciones han ido construyendo un sólido muro de respeto, las palabras de Kutxi Romero siempre han sido claras al respecto: “El que no quiere a los Barri no quiere a su madre”, eso se lo hemos oído decir más de una vez y todos hemos sonreído poniendo nuestra rúbrica bajo esa afirmación. Y digo todos porque Barricada, como Rosendo y alguno más, recibe la admiración de todo el espectro rockero, desde el punk hasta el heavy.


Un ejemplo claro de ese respeto llegó cuando nos sorprendieron con aquel ‘Latidos y Mordiscos’, el doble directo que nos presentaba la inesperada visión acústica de Barricada y que, como ocurriera con Metallica, parece que fue un “ya lo ha hecho Barricada, ya se puede hacer… eso sí, todos los que lo intentaron antes son unos moñas”.
Precisamente, en mi opinión, fue por entonces cuando se descorchó de nuevo la botella que había enclaustrado al grupo durante unos duros años, una década diría yo (¿95-2005 más o menos?) en la que muchos les volvieron la espalda. Un caso similar al que hace pocos días comentaba de Barón Rojo, tuvieron que pasar los años justos para que se les considerara mitos, gigantes de la escena y no solo “veteranos” de los ochenta.

Ahora que el tiempo les había devuelto al lugar que merecían con una obra como ‘La Tierra Está Sorda’, solo al alcance de unos pocos, y sus incansables actuaciones que se unieron a la mastodóntica (para lo que es el estado…) gira junto a Rosendo y Aurora Beltrán… llegan los comunicados, con más o menos arte, pero ambos serios, claros y sin tonterías, para anunciar que El Drogas salía de la banda treinta años (y tantas cosas) después. Vamos, para los fans como si Iron Maiden prescindiera a la vez de Steve Harris, Bruce Dickinson y de Eddie, porque El Drogas, además de músico ha sido el carisma de la banda, y su voz puede que esté incluso por encima de ese carisma, siendo con seguridad una de las diez más reconocibles y relevantes del estado (no hablo de calidad), sin por ello desmerecer al Boni y Alfredo… ¿Qué respondes a quién es el cantante de Barricada? ¿El Drogas? ¿El Boni y El Drogas? ¿Solo a los más románticos les sonarán raro canciones como “Blanco y Negro”, “Balas Blancas”, etc… cantadas por… quien sea?
Ya se, ya se, ni es el primer caso ni será el último de una voz carismática que cambia de sitio (Purple, Sabbath, Maiden, Judas…) pero lo cierto es que a unos los tenemos más cerca del corazón que a otros.

El año de descanso, la distancia entre los miembros y entre sus opiniones, el despegue de Txarrena y el inquieto culo del Drogas… al final todo ha derivado en dos caminos que ahora nos toca seguir con atención.
Barricada ya prepara un disco para primeros de 2012, que por lo que dicen será “100% Barricada” y Txarrena sigue el camino que arrancó brillantemente con ‘Azulejo Frío’… los seguidores ya tenemos un buen par de botas para recorrer los dos caminos que comentaba… y conociendo a estos navarros quizá sean más, pero lo que es seguro es que serán caminos firmes y de largo recorrido, porque aquí no se empieza una pelea que no se vaya a terminar para bien o para mal.

viernes, 2 de diciembre de 2011

AMPHISMIND: AMBAS MENTES


Si cada vez que abriera el buzón hubiera más sorpresas como ésta y menos facturas cambiaría bastante mi opinión sobre el servicio postal.

Desde Palencia me llega la primera grabación de una banda que se forma en 2010 pero que es evidente que hace tiempo que esto de hacer temblar cuerdas  y parches tiene pocos secretos para sus cinco miembros.
Para empezar a transformar sus sonidos en mis palabras os comento que ellos se definen como una banda de metal, y hacen bien, porque si cada vez que se presentaran tuvieran que decir “somos una banda de post-sludge-doom-thrash/death-prog-groove-metal-ehh…core”, pues se les iría la vida. Ya os podéis ir haciendo una idea de que esto no es un bonito camino de baldosas amarillas, en todo caso negras y en vez de baldosas, zarzas.
Otro punto a destacar antes de pasar a las canciones en sí es citar que el material se ha grabado en los estudios KLD de su tierra por Jorge Calderón, y la masterización corrió a cargo de Jens Bogren en los Fascination Street Studios (Opeth, Katatonia, Soilwork, Paradise Lost...), lo que, como suele pasar en estos casos, garantiza calidad, pulcritud, contundencia… pero se pierde algo de vísceras, lo que no tiene porqué estar reñido con lo anterior, pero parece que por encima de los pirineos es así.

Dicho todo esto cruzamos el lúgubre umbral que nos dirige a ‘Ambas Mentes’. Cinco temas componen este cuidado trabajo con un sonido que no debe dejarnos de sorprender por “mal” que nos estén acostumbrando las bandas más jóvenes que apuestan fuerte desde el principio.
Desde luego que cuando empiezas a escuchar el tema que da título a este Ep lo primero que te viene a la cabeza es… Hamlet, por agresividad, mezcla de voces, contundencia e idioma, pero hay que ir un poco más allá y despejar un poco los oídos para llegar a la oscuridad de atmósferas sobre las que construyen su muro de metal.
Densidad, oscuridad y tantos vaivenes vocales como instrumentales para mezclar un metal que logra fundir sus influencias yankees y escandinavas sin que se vea la cicatriz.
“Odio Sin Control” tiene un título suficientemente elocuente, aunque hay que aclarar que el control se intenta lograr, pero acaban rompiendo las riendas siempre con una cadencia en la base de sus guitarras que no va permitir que puedas hacer otra cosa que no sea agitar la cabeza mientras lo estés escuchando.

Una constante en su música es dar un punto de luz a un cuadro que ha acabado con todos los botes de pintura negra, la mayoría de las veces con una guitarra más limpia (difícilmente diría solista), otras con algún elemento de base electrónico que contribuye aun más en la tarea de envolverte en la atmósfera de cada tema, y otras con el juego de voces que puede pasar de un coro sutil a otro en el que cantan Chucky, un orco de Mordor, Freddy Krueger y Manson, pero Charles Manson.

El grupo une una brutalidad gótica (por así decirlo y entendiendo bien el término, por favor) con un sabor final a orígenes “sabbathicos” del heavy metal que empiezan a llevarnos cada vez más al doom en la progresión de estos cinco cortes. (Sí, son pocos, por eso no me quiero ni imaginar lo que harán cuando puedan grabar nueve o diez).
 “Catarsis de Marionetas” nos recibe a cuchillo. Marca el punto de inflexión, la intensidad vocal se eleva al máximo y nos hayamos en un puente entre el thrash/death y el doom que nos lleva a áridos referentes americanos como Down, Crowbar o Kingdom of Sorrow. Las luces se apagan y hacia la mitad del tema todo empieza a derrumbarse a tu alrededor.

Más o menos por aquí empezarás a pensar que este tipo de metal solo puede venir de un sitio en el que hace mucho frío, y es así.
¿No sabes lo que es doom? ponte el principio de “Desaparecer”. Si escuchas este tema un par de veces seguidas espero que los Reyes Magos te traigan el Magnicidionova, porque si no cometerás uno real. Impresionante descarga que te dejará exhausto, porque cada elemento de la banda se comporta como un martillo pilón.

Para terminar el grupo nos ofrece un tema en inglés, “Deadseed”, que aunque quede de puta madre por lo efectivo que es siempre este idioma, personalmente me quedo con la versión cervantina. La canción se muestra apabullante, como en el resto de una grabación en la que sin alardes y a base de una agradecida y contundente simplicidad (que no simpleza) en el golpeo de los riffs te acaba tumbando, sin inventar nada, pero cogiendo todo el metal que quieres llevarte a las orejas y metiéndotelo a presión.

Las letras tampoco dejarán insatisfechos a los amantes del existencialismo, de las dudas más profundas… si se habla de amor no se hace para llevar flores precisamente a tu balcón.
¿Peros? Pocos, porque el espectro musical es amplio y se ha sabido condensar en cinco cortes. Quizá a alguien le parezca demasiado básico, yo más bien diría conciso y directo, y creo que en un escenario más amplio tendrán todavía más que ofrecer, que en calidad ya tienen bastante.
Puede que precisamente el sonido, la mezcla final, no haya sido tan apropiada como esperaban, por lo que decía al principio, parece que vas a ver el partido con un amigo y tiene tan limpia la casa que no te deja comer patatas ni beber cerveza y todo tiene un sitio tan perfecto que no puedes mover el sofá.
Será cuestión de gusto y si eres de los que buscan la perfección puede que con esta primera grabación encuentres una banda que en el futuro te ofrezca un metal tan pulido que puedas comer sobre él, pero creo que se acercará más a los gustos de quienes busquen pegada, clase y agresividad en un marco oscuro, una batalla nocturna en el bosque nevado. A mí ya me tienen siguiendo sus pasos. Muy recomendable.


viernes, 25 de noviembre de 2011

BARÓN ROJO Y EL 12-1 A MALTA


Permitidme que empiece hablando un poco de deporte, no tardaré en explicar el motivo de hacerlo.
Puede que a los más jóvenes les sorprenda saber que hubo un tiempo en el que no éramos campeones del mundo, ni de Europa; un tiempo en el que celebrábamos que Alex Crivillé acabara sexto sus carreras, que la F1 nos sonaba que tenía un piloto llamado Luís Pérez Sala y que solo Pedro Delgado y más tarde Miguel Indurain nos daban una alegría de tarde en tarde. En ese momento los más mayores nos recordaban “el gol de Marcelino” que dio a España la Eurocopa de 1964, o la enorme emoción de lograr meterle doce goles a una selección menor con los que nos clasificamos para otra competición, el famoso “doce-uno-a-malta” (se dice así, de carrerilla).
Los 11 del 12-1
Los recuerdos en blanco y negro de Bahamontes o Santana eran todo lo que teníamos… hasta 1992, con las olimpiadas de Barcelona, cuando todo empezó a cambiar y fuimos (más bien fueron los deportistas) conquistando todos los peldaños que ha escalado el deporte español.
¿A qué viene esto? Pues viene a que creo haber identificado cuál es el “doceunoamalta” de nuestra música.



Hace pocos días descubrí en una red social que se está preparando una especie de película-documental sobre Barón Rojo, posiblemente la banda más grande o más importante de nuestro rock y, para variar, esto me hizo dar un par de vueltas a la cabeza.

Recordé cómo en una de mis muchas conversaciones con Oscar Sancho (dan para tanto) hablábamos de las bandas más importantes de la historia y cómo no pude estar más de acuerdo con él cuando me dijo que entre los más grandes internacionalmente incluía a Barón Rojo. Parto de esa base, de que me encanta el legado de la banda y valoro al máximo el momento en que se fraguó su leyenda y a todos los músicos que han pasado por ella. Pero mirándolo con la perspectiva que da el tiempo… son el gol de Marcelino y dentro de él encontramos detalles que son sus propios “doceunoamalta”.

Escribiendo la leyenda
Sabemos que en España es difícil que se valore a una banda de rock como se merece, vale, pero, hasta que se materializó la reunión de la formación original, Barón Rojo ha sido un glorioso recuerdo que se ha mantenido vivo por el tesón de los hermanos de Castro que han visto cómo sus actuaciones pasaban de llenar grandes recintos a ser poco más que verbenas y sus discos pasaban de ser joyas y paradigmas del rock duro, del heavy español, a pasar completamente inadvertidos incluso para sus más fieles seguidores.
Que los 90 fueron duros para el rock español lo sabemos, pero la banda siguió adelante y eso lo aplaudiré siempre. Lo que no me gusta es lo que decía antes, sus “doceunoamalta”, el vivir de “fuimos”, “hicimos”, tener que aprovechar cualquier ocasión para reivindicar que se llegó alto, que tocaron con Bruce Dickinson, que tocaron en el Reading, que llenaban el pabellón del Real Madrid… bien, si los primeros años de los ochenta fueron la hostia, ya lo sabemos.

Han tenido que pasar dos décadas para que la gloria que merecen se empiece a ver en el horizonte. Primero fue ‘En Clave de Rock’, aquel lanzamiento de directo junto a una gran orquesta que de alguna forma resucitó el interés de todo el mundo por la banda después del desafortunado ‘Ultimasmentes’ y casi simultáneamente se anunció la reunión de la banda original, todo apuntaba para arriba, aunque el comentario que me hizo Armando mientras le entrevistaba volvió a poner a mis ídolos en la tierra: “Ahora se puede contratar a Barón Rojo original, a Barón Rojo con la formación de hoy y a Barón Rojo con la orquesta…”, las veces que hayáis visto una cosa u otra os dirán mucho del resultado de esta oferta aparentemente tan beneficiosa para grupo y seguidores…
De alguna forma la reunión que se anunció efímera y se ha prolongado… lo que ha hecho falta, ha devuelto a la banda a lo más alto. El tiempo de sufrimiento (de 1990 a ¿2010?) ha sido el necesario para poder considerar a grupo y obra como mitos y eso me alegra, pero… señores, es que en ese tiempo nuestras bandas han sido campeonas de Europa y del mundo.

Conquistadores (Héroes del Silencio)
Me explico, mientras los hermanos de Castro paseaban su “hemos tocado con Bruce Dickinson”, en España la música ha sufrido una evolución similar a lo que comentaba al principio en el deporte. De tener cosas que se valoraban por la etiqueta “son de aquí” hemos pasado a tener bandas de nivel internacional capaces de hacer sonrojar a más de un  teutón, inglés o yankee. Ejemplos de calidad podría dar muchos pero primero me interesan los ejemplos de éxito, las bandas que traspasaron nuestras fronteras y se asentaron en mercados y mentes internacionales. Ahí tenemos grupos tan variopintos como Ska-P, Mägo de Oz o, un poco antes, a los Héroes del Silencio. Tres bandas con tres estilos diferentes que han llevado el rock español a lo más alto en todo el mundo, con un éxito que no se ha interrumpido ni siquiera en el tiempo que, por ejemplo Ska-P o más descaradamente Héroes del Silencio, han estado en barbecho.

Dejaba antes colgados los ejemplos de calidad y es que esos son los que sufren de que sigamos hablando de nuestros “doceunoamalta”, de nuestros “goles de Marcelino” y no veamos que lo que hay que intentar es volver a ser campeones de Europa y campeones del mundo, que bandas que no hayan cumplido los veinte años puedan llegar a hacerlo gracias a nuestro apoyo, porque los que ya… han ganado ligas, como Hamlet, Warcry o Marea (por citar tres muy diferentes) también necesitan que desde abajo vengan empujando con fuerza.
Adorar a nuestro pasado no puede hacer que descuidemos el futuro.
El presente de nuestro rock
Veamos ese documental de Barón Rojo con admiración, pero sabed que Steel Horse, Shinova, No Apto, Zenobia, Dragonfly, We All Fall, Cronómetrobudú, Suru, Mister Machín, Necroberus, Opera Magna, Piel de Serpiente, Calibre Zero, Nox Interna, Wild, Dünedain, Ciclón, Después de Todo, 69 Revoluciones, Vita Imana, El Dorado… y un etcétera de dimensiones inimaginables os están esperando encima de los escenarios.
Esa es la cantera que nos tiene que volver a hacer grandes y que cuando seamos viejos y digamos “me acuerdo yo de las que liábamos viendo a Angelus Apatrida”, nuestros nietos mueran de envidia pero nos callen la boca porque tengan todavía más donde elegir.
El futuro reescribe hoy.
Servidor con los Barones, gran recuerdo.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

BÜRDEL KING: Presentación, firma... y reflexión


Fnac Parquesur, Leganés, Madrid
 

Me picaba la curiosidad, no puedo negarlo. Después de tanto tiempo desde que se empezara a hablar de este proyecto tenía ganas de comprobar cómo se había llevado a cabo ese ideal más rockero y macarra que la nueva banda de Txus DiFellatio lleva por bandera.

Llegué pronto a la pequeña sala/bar que este centro comercial destina a la presentación de los más diversos eventos culturales, esperando la masiva acogida que se presume cuando este nombre, Txus, anda por medio, y me sorprendió encontrarme a media hora de que la presentación diera comienzo, con poco más de una veintena de seguidores. El número de asistentes fue en aumento, pero no llegó a cumplir las expectativas que me había creado, recordando que por ejemplo la presentación de otro nuevo proyecto como el de Rulo y La Contrabanda hizo que no cupiera ni un alfiler en ese mismo lugar.
Es posible que la cercanía de un evento similar en la céntrica plaza de Callao, para seguir con la presentación de este 'Ladran, Luego Cabalgamos', hiciera mella en la intención de los fans por acercarse a este punto del sur de Madrid, pero también es posible que el “efecto Txus” esté perdiendo fuerza. Habrá que verlo en próximas citas.
 
Parece que no paro de mencionar a Txus en lo poco que llevo escrito, cuando el resto de miembros de esta banda tienen en sí mismos un enorme peso específico, pero si los propios carteles del grupo que decoraban el escenario ya rezaban “el nuevo proyecto de Txus Di Fellatio” bajo la foto de los seis miembros, está claro que el que va a soportar el peso, las críticas y alabanzas, de este burdel va a ser el Bilbaíno.
Precisamente estos carteles, su web o el propio disco dejan ver el esmero que se ha puesto en la imagen del proyecto, que nos transporta a un idílico lupanar yankee en el que el humo y el alcohol se dispersan a golpe de teta. Un apartado, el de la imagen que parece será vital en este proyecto. Eso sí, unos llevan ese espíritu más dentro que otros por lo que pudimos ver.

Tras la prueba de sonido, en la que descubrimos que solo tendríamos con nosotros a cuatro de los seis integrantes de la banda y transcurrida la consabida media hora de retraso que se supone a artistas de este calado teníamos delante la versión acústica de Bürdel King.
Faltaron a la cita Alberto y Anono, ocupados con sus respectivas bandas “oficiales”, Hamlet y Stafas, pero allí teníamos por orden de aparición a Frank y a Txus, los Mägos, a Javi Díez, tremendo músico que ha pasado por las filas de Arwen, Ebony Ark, actualmente en Biosfear y colaborador habitual de Mägo de Oz y prácticamente el hemisferio izquierdo del cerebro compositivo de Txus; y Sergio Martínez, otro gran nombre del rock madrileño que ya estuvo en Mägo de Oz allá por 2003 y que antes había pasado por los añorados Ankhara y posteriormente formaría parte de bandas como Mr.Rock, Wayland, Belfast más recientemente y que volvió a primera línea de fuego uniéndose a la segunda acometida del grupo de Leo Jiménez, 037.

Tres guitarras, que en algún momento se hicieron demasiadas y la voz de Txus… la voz de Txus, qué decir. Según nos dijo llegaba mermado por la gripe, aun así hay dos formas de ver su voz: una, que es ideal para un proyecto que quiere ser árido, macarra y sucio, por así decirlo, pero por otro lado creo que pocos grupos le elegirían como vocalista en un… casting, lo que solventa con su carisma (para bien o para mal), tablas y ese tono cálido y calmado tan personal. Según dijo “habíamos pensado en suspender, pero es como si Yosi no actúa por no estar bien de voz”, que el buen humor no va a faltar en este grupo ya se veía desde el principio.

Eso sí, un par de consejos del amigo Jose en temas técnicos, de respiración, etc… no le vendrían mal, porque en los pocos destellos que nos dejaron ver del disco se adivinaba en la cabeza de Txus un pensamiento parecido a “quién me manda a mí meterme en estos jardines”. Faltaban ensayos y se notaba… no solo porque el cantante saliera con las letras escritas en un papel (lo que no extraña en alguien tan prolífico en palabras), pero las tres guitarras supieron salir airosas de cuantos desajustes se encontraron.

Decía que solo fueron algunos destellos del disco, concretamente tres, los que nos presentaron para que aquello no fuera solo una firma de discos.
Entre las constantes parrafadas del líder, algo que esperemos controle para futuras actuaciones más largas (aunque conociéndole…), el combo nos regaló “Inmaculada”, “El Sexorcista” y “La Luna En Ti”.
Si bien en el disco, como ya hemos comprobado, se logra la meta que la banda tenía marcada gracias a la electricidad y teclados, en acústico, especialmente el primer tema, quedó demasiado similar a una versión rockera de una reunión de seminaristas modernos, si estos le cantaran a una enorme vagina en la que uno se puede meter a merendar.
El toque de melodías de Mägo no está lejos y con la canción desnuda, por muchas guitarras que hubiera, parecía más algo perteneciente a ‘Héroes de Pacotilla’ que a un rockero burdel.

El segundo tema, “El Sexorcista”, mejoró mi percepción de esta versión acústica de los temas, me gustó más tanto en lo musical como en la letra, pero lo que más me gustaba según avanzaba el evento era ver al Txus real hablarnos de Txus DiFellatio, porque, como nos comentaba, lo que quiere es que esta banda sea un proyecto serio y creíble, para más o menos público, aunque a él y a sus letras no haya que tomárselos siempre muy en serio. Puso un ejemplo con la siguiente canción, la que ha sido el primer single del disco, aunque se le escapó, sin pensarlo, una comparación algo desafortunada. “La Luna En Ti”, dijo dentro del discurso sobre el Txus al que le gusta provocar, “es una canción muy Mägo, una canción muy moña –hasta aquí la parte desafortunada si se saca de contexto como de hecho estoy haciendo- es el single de este proyecto tan macarra, para que me pongan verde en los foros del Basa y…”. Los foros metaleros, eso sí que es un lupanar de opiniones.

Así transcurría y terminaba la presentación con Txus asfixiado previo paso por backstage para volver luego a afrontar la firma de discos y ráfagas de fotos a las que siempre (y es algo que hay que subrayar para alguien que ya está en otra liga) se muestran prestos y solícitos.

Antes de terminar quería volver a las palabras de Txus en las que decía “a mí no hay que tomarme nunca muy en serio”, en las que vi un discurso cercano y sincero sobre el personaje que se ha creado. Pero pensando en lo que pasó con la portada del octavo número de HeavyRock Estatal, ya sabéis, aquel que titulaba “¿Adios a Mägo? Txus sale del armario”, se me ocurren un par de cosas al respecto.
El músico mostró su malestar con aquella portada y la insuficiente rectificación de dicho medio, anunciándose incluso posibles acciones legales… vuelve aquí esa frase, ¿lo tomamos en serio? Quizá fuera yo realmente el único que me suponía un éxito arrollador de este proyecto y el mismo Txus buscara la polémica (a la que nunca ha hecho ascos) para tener un poquito más de promoción que tampoco le venía mal a la revista… o quizá sea todo cierto y la amistad que había entre ambos lados de Oz, me refiero a Txus y a la dirección de Heavy/Rock, haya estado siempre bailando en un fino alambre del que finalmente los dos hayan decidido tirarse… o unirse más para tratar de seguir bailando sobre el mismo alambre. Pero, en realidad, hoy en día ¿a quién le importa esto? Si se buscaba la polémica parece que no ha durado ni servido demasiado y que la opinión del público rockero (más o menos joven) sigue sin ser material maleable.
¿La cultura clínex también ha acabado con la relevancia de las polémicas entre músicos, o entre músicos y medios?

El caso es que ya tenemos un nuevo proyecto en marcha que ahora me plantea el reto (a mí tampoco me toméis muy en serio casi nunca) de asistir a un concierto “enchufado” para comprobar si este Bürdel realmente es el King o se queda en lo que se quedó ‘La Ciudad de Los Árboles’, porque el mismo discurso del sabor del bourbon, el cigarro en la boca, los antros de calles oscuras y demás ya lo oímos cuando los de Oz quisieron salir del ambiente tan cerrado que se creó con los ‘Gaia’.

Quizá Mägo de Oz ya es más grande, o tiene más entidad que sus propios miembros, como un Frankestein rockero que ha marcado su propia personalidad por encima de las diferentes piezas de las que estaba hecho, provocando que dos de sus partes principales busquen saciar sus necesidades más primarias con un nuevo proyecto.
También puede que esto signifique más tiempo para los demás mägos y que volvamos a tener un disco en solitario de Jose, por ejemplo… tantas cosas hay en el mundo de Oz…

Esta tarde (21 septiembre) los tenéis en Callao, en la Fnac, pasaros y me decís vuestra opinión de Bürdel King.